Desde que te conozco y, a la vez, desde que sé que puedo dejar de
verte, he recibido con ansia cada mañana, con más ansia que nunca los ocasos,
he respirado y vivido con más deseo que nadie los crepúsculos.
Me gusta estar sola y pensar en
ti.
Recordar como poco a poco llegue
a quererte. Me gustas aun que me niegue a aceptarlo, me he hundido en el
silencio de mis pensamientos tratando de hallar la forma de demostrarte cuanto
es lo que me importas.
Pero ahora todo indica que me
tengo que despedir de ti, pero no quiero hacerlo sin antes comentarte que deseo
que hagas de tu vida algo muy grande, que realices tus proyectos. No sabes cómo
me duele no poder ser tu amiga más importante.
¿Sabes? He comprendido que formas
parte de mi, se que tal vez nunca estarás a mi lado pero también sé que nunca
te irás, porque vivirás en mis recuerdos.
Por último te bendigo en tu
caminar hacia la cumbre pidiéndote que te abandones en manos de Dios y pidiéndote
que cuando triunfes le brindes a él toda la gloria y honra.
CITA TOMADA DEL LIBRO LOS OJOS DE
PRINCESA DE CARLOS C.S
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